Homologada según la directiva 97/23/CE, también conocida como PED, a través de organismos certificados y calibrada en nuestros establecimientos, la válvula de seguridad para caldera es un componente indispensable para la protección de la instalación contra sobrepresiones peligrosas, un caso que podría darse en instalaciones con calentadores sea cual sea el tipo de combustible.
Una vez instalada la
válvula de seguridad para caldera, ésta se encargará de descargar la presión en exceso abriéndose y permitiendo la salida de parte del fluido presente en la instalación, devolviendo así la presión a niveles normales. Estas válvulas tienen también la función de retención, es decir, se abren solo en caso de necesidad efectiva, evitando fastidiosos goteos.
Existe también un modelo de válvula de seguridad para caldera equipado con un comando para el control manual de su apertura, lo que permite descargar completamente la instalación en caso de necesidad. Esta función es útil, por ejemplo, en casas de vacaciones no habitadas durante el invierno, evitando así los problemas del hielo.
Cada válvula de seguridad para caldera está realizada de forma que el usuario final no pueda modificar su calibrado.
I contenuti di questo sito non hanno carattere di periodicità e non rappresentano 'prodotto editoriale'.