Con los años, los avances de la tecnología desarrollados para obtener instalaciones sanitarias eficientes para la acumulación de agua han permitido mejorar los estándares de seguridad. De un modo particular, un instrumento de importancia caudal introducido para tutelar la salud de todos los usuarios de calentadores y termos: las válvulas de seguridad. El principio de funcionamiento de una válvula de seguridad prevé un muelle precargado, con valores de tarado fijados en el diseño. El muelle presiona con la fuerza de precarga sobre un obturador y permanece en posición contra el obturador hasta que la presión en el interior del conducto llega a un nivel determinado en el cual se produce la apertura del propio obturador, permitiendo la salida del líquido y disminuyendo por lo tanto el valor de presión en el interior del conducto hasta valores nominales.
Las válvulas de seguridad producidas por Gnali Bocia desempeñan además una función añadida, la de antigoteo. Se consigue con un mecanismo formado por un sello, una varilla guía y una tuerca, que permiten el accionamiento del sistema de seguridad de la válvula exclusivamente por una presión muy elevada del líquido, evitando un periódico y fastidioso goteo.
Las
válvulas de seguridad se subdividen, además de por forma y geometría, por la posibilidad de descarga manual. Las válvulas de seguridad que presentan un sistema de este tipo se utilizan en lugares donde cualquiera puede estar autorizado para la gestión de la válvula. En cambio, en lugares donde sea necesaria una eventual intervención exclusivamente reservada a los operarios, se omite la descarga manual.
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