¿Noches de insomnio despiertos por culpa del ruido que hacen las burbujas de aire en las tuberías de nuestra casa, y parece que más que contar ovejas contamos burbujas? Hay una solución para resolver este problema: instalar en radiadores o en puntos de acumulación de cada instalación una válvula purgadora de aire, que permita eliminar eficazmente los gases disueltos en las instalaciones.
La eficacia de la
válvula purgadora de aire depende mucho del punto donde se instale, como decíamos anteriormente. Debería ser en el punto más elevado de la planta o de la habitación, o de cada radiador.
En el caso de tuberías no a la vista o dispuestas en puntos incómodos o de difícil acceso, la válvula purgadora de aire será del tipo automático, por tanto podrá dormir tranquilamente y el dispositivo trabajará de forma autónoma.
La misma solución se puede encontrar también para radiadores. En este caso la válvula purgadora de aire más común es la manual, pero la precisión de trabajo y la técnica moderna nos han permitido realizar para esta aplicación un modelo automático. Lo único que debemos recordar es controlar cada cierto tiempo la correcta presión de la instalación.
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